También me han realizado una prueba de esfuerzo y un ecocardigrama, la última fue hace dos años, practicamente me ha salido igual, por un lado tengo dos años más pero también de entrenamiento, por lo que creo que en realidad no me salió también como desearía.
Mi ciudad hierve de corredores, empiezo a sentir el run, run de la maratón, veo muchas camisetas de maratones anteriores, mucha gente que va despacio, no tanto como yo, pero despacio.
Sigo trabajando con la motivación, mi talón de Aquiles, estoy deseando que llege la reunión con el grupo de preparación, haber si la compañía de más corredores me anima un poco, no estoy mal de ánimo pero me gustaría tener otro talante, me dejo llevar por entrenamientos muy mecánicos, muy planos, los hago, los termino pero es como si me faltara algo, algún reto nuevo podría ser conseguir un tiempo, por ejemplo, posiblemente en eso me voy a centrar.
La carrera de la maratón es muy grande, mucho más grande que cada uno de nosotros, asunta cuando lo pensamos, pero tiene ese misterio, cada maratón para cada uno es diferente, conozco a muchos que han hecho muchas maratones y me han comentado que todas son diferentes, seguiremos entrenando, pero me consuela que cuando paso por donde acaba la maratón, me sigo emocionando, no como el primer día, pero ya noto el run run de la maratón.
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